El camino se me hace tan notablemente nuevo que, intuyo, deberé despojarme de todos mis "viejos" equipajes, y animarme a descubrir desde muy dentro qué es necesario para que esta parte del camino pueda vivirla desde lo más verdadero.
Ahora las convicciones, los viejos modos, las razones, los juicios ajenos y propios, se vuelven una bella y profunda tensión. Sé bien que va a parirse algo luminoso y verdadero, sé que no es posible dar pasos atrás en algunas certezas que el corazón empieza a reconocer intensas, hondas, reales.
La búsqueda abierta en la que me había sumergido, me sorprende en un hallazgo novedoso y sorpresivo. Parece que buscando, y buscando, y buscando...la primera encontrada he sido yo. Un encuentro que desborda regalo, que desborda amor, que desborda...
Descifro casi sin esfuerzo, preguntas y respuestas de otro tiempo y de éste; advierto que "entiendo", que se hace la luz en algunas oscuridades añejas.
Soy encontrada, sé y siento que es REGALO. Pregunto ¿qué buscaba? percibirme encontrada de esta forma me devuelve respuesta y contextualiza la pregunta de un modo nuevo. He buscado el amor, dar respuesta al amor, entregar al fin el corazón ENTERO. He buscado el amor, y el AMOR me encuentra, me envuelve, danza conmigo a un ritmo que no sé...pero me dejo llevar.
Ahora todo se hace nuevo.
Siento que algo desde dentro, se abre, se suelta, se libera. Casi alas en el alma.
Y yo, en la mejor versión jamás vista de mí misma.
Ahora en movimiento creativo y vivo, lo más mío sale a la luz, se despliega sin límites. El alma canta, baila, se anima, crea y recrea. Se viste de fiesta, sale del escondite, se muestra. Disfruta, se comparte, sueña. Se descubre, se despierta, se reafirma, se nombra con nuevo nombre. Se abre, se da, se reconoce. Se espeja, se integra y reconcilia con la historia, con la historia entera.
El alma comulga con la vida entrelazada de otros, recibe un eco hondo de sus vidas, devuelve el propio eco a las suyas. Se vuelven uno, lo mismo, unificados.
Siento un profundo gozo por la vida que vivo, con todo lo que me ha traído hasta acá -incluso y sobre todo, lo dolido- .
Siento un profundo deseo de CELEBRAR lo nuevo, lo que viene, lo que va siendo; y de AGRADECER tanto regalo.
